Las tribulaciones de un sobrio en la ruta de los borrachos
Buenas…. No esta es una de esas chocoaventuras que le ocurren a uno y lo hacen pensar, pues ahí les va esta perla: el Sábado salí por la noche a verme con mi gran amiga Angely de plan de teatro*, el plan muy rico, la verdad tenia hace tiempo ganas de hacer algo así, tintico antes de la obra, discusiones de trivialidades, transcendencias y sesión de chistes, luego empezó la obra, ahhhh que maravilla, me encanto, me reí mucho, aunque también me congele, ¡Que frío más berraco!, pero bueno fui fuerte y me lo aguante, y salí con cara de ponque, luego cogimos a caminar y hablar por el área de la 72, y después a tomarnos un café a un bar de rock** porque estoy tomando unas pastas para la tos.
Y pues ahí empezó la reflexión que es el fuerte de esta entrada, imagínense en una mesa como 10 borrachos, cantando a grito herido música de Calamaro***, pero se veía súper cómico eso de estar viendo a esos tipos gritando, y tratando de mantenerse de pie con la jartera tan fuerte que llevaban, ahhh pero bueno eso esta bien, tampoco me voy a poner de moralista, estaban celebrando algo, y pues aunque estaban tomados, se comportando de acuerdo al sitio, no estaban haciendo destrozos, y la estaban pasando rico.
Luego como a las 11:45 tomé un bus para mi casa, y pues a esa hora ya pasa solo la ruta de los borrachos, y pues ahí salio la otra cara de la moneda, más o menos en el centro se subió una señora a pedir plata y un borracho de fondo empezó a gritarla y tratarla mal, luego empezó a interrumpir y burlarse de la señora, al poco rato parece que el amigo lo calmo, cuando de un momento a otro el amigo le dice: “Gordo es mejor que nos bajemos aquí, usted ya esta muy mal”, y empieza a arrastrarlo por todo el pasillo del bus, y de un momento a otro un muchacho –Borracho por cierto- empieza a gritar un montón de sandeces y se lanza a darle un puño, entonces se imaginaran el cuadro, en la puerta señora pidiendo plata, un tipo arrastrando a un gordo, música de bisutero a todo volumen, el pasillo lleno de gente y fuera de eso toda mareada por los efectos de trago, una señora gritando y el muchacho al otro extremo del bus gritando que a él y a su amigo no se la montaban.
Afortunadamente no paso a mayores, el amigo no se como hizo logro bajar al gordo, la señora del bus recogió algunas monedas, un billete de mil y una libra de pasta para sopa, el muchacho y el amigo resultaron riéndose a los 5 minutos, y pues nadie resulto herido, a excepción de una pobre muchacha que recibió un golpazo en toda la cabeza, porque cuando el muchacho le lanzo el puño al gordo borracho el bus freno, la gente se movió, empujaron al muchacho y este no alcanzo a frenar el golpe, eso sonó como los golpes que Don Ramón le da al Chavo.
Como se pueden dar cuenta esta entrada esta llena de contrastes referente al trago, lo bacano que es pasarla con amigos, reírse algo, cantar a todo pulmón, sin molestar a nadie, sin hacer daños, y disfrutar como el caso de los borrachos del bar de rock, y lo fastidiosos, y la cantidad de problemas que pueden ocasionar la gente que se deja llevar por el trago, que por el hecho de tener más de las cervezas que se puede en la cabeza ya se las puede dar de mucho. En fin descubrí una vez más el agua tibia: “Para tomar no solo hay que educar el hígado sino también la cabeza”.
Y pues ahí empezó la reflexión que es el fuerte de esta entrada, imagínense en una mesa como 10 borrachos, cantando a grito herido música de Calamaro***, pero se veía súper cómico eso de estar viendo a esos tipos gritando, y tratando de mantenerse de pie con la jartera tan fuerte que llevaban, ahhh pero bueno eso esta bien, tampoco me voy a poner de moralista, estaban celebrando algo, y pues aunque estaban tomados, se comportando de acuerdo al sitio, no estaban haciendo destrozos, y la estaban pasando rico.
Luego como a las 11:45 tomé un bus para mi casa, y pues a esa hora ya pasa solo la ruta de los borrachos, y pues ahí salio la otra cara de la moneda, más o menos en el centro se subió una señora a pedir plata y un borracho de fondo empezó a gritarla y tratarla mal, luego empezó a interrumpir y burlarse de la señora, al poco rato parece que el amigo lo calmo, cuando de un momento a otro el amigo le dice: “Gordo es mejor que nos bajemos aquí, usted ya esta muy mal”, y empieza a arrastrarlo por todo el pasillo del bus, y de un momento a otro un muchacho –Borracho por cierto- empieza a gritar un montón de sandeces y se lanza a darle un puño, entonces se imaginaran el cuadro, en la puerta señora pidiendo plata, un tipo arrastrando a un gordo, música de bisutero a todo volumen, el pasillo lleno de gente y fuera de eso toda mareada por los efectos de trago, una señora gritando y el muchacho al otro extremo del bus gritando que a él y a su amigo no se la montaban.
Afortunadamente no paso a mayores, el amigo no se como hizo logro bajar al gordo, la señora del bus recogió algunas monedas, un billete de mil y una libra de pasta para sopa, el muchacho y el amigo resultaron riéndose a los 5 minutos, y pues nadie resulto herido, a excepción de una pobre muchacha que recibió un golpazo en toda la cabeza, porque cuando el muchacho le lanzo el puño al gordo borracho el bus freno, la gente se movió, empujaron al muchacho y este no alcanzo a frenar el golpe, eso sonó como los golpes que Don Ramón le da al Chavo.
Como se pueden dar cuenta esta entrada esta llena de contrastes referente al trago, lo bacano que es pasarla con amigos, reírse algo, cantar a todo pulmón, sin molestar a nadie, sin hacer daños, y disfrutar como el caso de los borrachos del bar de rock, y lo fastidiosos, y la cantidad de problemas que pueden ocasionar la gente que se deja llevar por el trago, que por el hecho de tener más de las cervezas que se puede en la cabeza ya se las puede dar de mucho. En fin descubrí una vez más el agua tibia: “Para tomar no solo hay que educar el hígado sino también la cabeza”.
* Si quieren saber que vi pues no es más que miren cual fue mi última alucinación.
** Si se puede entrar a un bar medio rockero y pedir un capuchino, jajajaja se ve muy curioso pero se puede.
*** Bueno al decir verdad 12 gatos cantores incluyendo a mi amiga y a mi, porque a Calamaro no se le puede negar una buena cantada
Ahh pero que duro tu regreso………..que pecadito mejor te hubiera llevado conmigo…en fin.
Bueno la verdad es que lo que siempre he pensado uno es libre de hacer lo que le desee mientras eso no interfiera con la libertad de los otros, entonces la verdad me parece muy terrible esa situación; como puede uno llegar a perder el control de esa manera y molestar a los demás……..y pues tu reflexión es muy interesante, pues al final para el hígado existe el sal de frutas, pero para esos líos de cultura???; esa es la parte difícil.